Uruguay es el hub regional por excelencia para el Cono Sur: ofrece importantes ventajas para la localización de Centros de Distribución Regional (CDR´s).
Uruguay tiene una posición estratégica como puerta de entrada al Mercosur, con dos de sus principales puertos ubicados en la salida de la hidrovía Paraná-Paraguay-Uruguay. El país cuenta con un moderno aeropuerto y la red de transporte carretero más densa de toda Latinoamérica. Tiene puertos con una infraestructura de primer nivel, únicos en la costa Atlántica Sur que operan bajo el sistema de Puerto Libre y es el segundo país de América del Sur en calidad de infraestructura portuaria, según el World Economic Forum (The Global Competitiveness Report 2016-2017).
El país cuenta con ventajas competitivas en la región, en virtud de la normativa vigente de Zonas Francas, Puertos Libres, Aeropuertos Libres y Depósitos Aduaneros. La misma permite almacenar y realizar diversos procesos a la mercadería sin abonar tributos aduaneros, impuestos a la importación y exportación (e impuestos a las ganancias en caso de la Zona Franca). Posteriormente, la mercadería se distribuye a la región haciendo uso de los acuerdos comerciales vigentes con Uruguay, llegando en pocas horas contra pedidos (just in time), evitando las demoras y reduciendo los stocks necesarios en cada país de destino.
La mercadería en tránsito ocupa un lugar importante en la actividad logística de Uruguay. Aproximadamente el 50% de los movimientos de contenedores del Puerto de Montevideo estuvieron asociados a actividades de Hub entre 2008 y 2015, mientras que el resto estuvo asociado a actividades de comercio de exportación e importación.
Uruguay cuenta con un completo marco legal que brinda las más amplias garantías y reglas de juego claras, además de conceder atractivos incentivos a los inversores. La inversión extranjera recibe por ley el mismo trato que la inversión nacional. El país creció a una tasa promedio anual de 5% entre 2005 y 2015, siendo así uno de los países de mayor crecimiento en la región. Las principales calificadoras (Fitch Ratings, Moody´s y Standard & Poors) mantuvieron el grado inversor de la deuda uruguaya y su visión favorable del país.